La Perla
Una suite bien nombrada, con sus balcones y su emparrado romántico, La Perla mezcla los pámpanos de la viña con una vista insuperable del mar, que preceden el jardín y la piscina.
Por su entrada privada a través del salón, con una biblioteca bien provista que les invitará al dejamiento, se aprovechará del desprendimiento en el emparrado y el jardín.
Desde la recámara abriéndose sobre este panorama excepcional, le acoge una cama queen de 180 cm. El alegre susurro de un arroyo que se cuela justo bajo sus ventanas, mece discretamente sus orejas.
Al lado del estaque donde brotan nenúfares y caña, donde juegan peces rojos, una chinchorro venezolano le espera por una deliciosa siesta, amenizada por el dulce mormuro de un hilo de agua.